20/10/06

Guardian



Esta es una máscara bastante particular pues parece muy agresiva pero una vez puesta se transforma en cómica. Esto lo atribuyo a que tiene la boca y los ojos muy abiertos y funciona casi como una media máscara de comedia. La mandíbula del "guardián" queda por debajo de la mandíbula del actor y esto desenmascara el gesto que esté haciendo por debajo de la máscara. Los ojos de la máscara quedan muy pegados a la cara del actor con lo que el campo visual es muy amplio y permite bastante despliegue corporal. Estas pautas son las que me sugirieron el diseño de las máscaras del coro de Antígona; posteriores al "guardián".

Con ella intenté reproducir una escultura que vi de un demonio guardián chino, pero en la práctica resultó ser más la posible máscara de un Deva que la de un demonio o, en todo caso, la de un demonio burlón.

18/10/06

Gaudi

Son famosas las "chimeneas de los guerreros" de La Pedrera en Barcelona construidas por Antoni Gaudi, donde no puedo dejar de ver innumerables máscaras.

Inspirándome en una de esas chimeneas modelé a "Gaudi". Una máscara que cambia de personaje según se la ponga derecha o invertida. Esta máscara fue usada mucho en espectáculos de mimo, en especial por la compañía de Angel Elizondo. En uno de sus espectáculos la actriz que la llevaba la utilizaba para cambiar de actitud en escena.


16/10/06

Duende

Una máscara bastante vieja y que ha trabajado mucho en psicodrama, en obras de mimo y teatro y en performances de teatro callejero. Ha llegado a convertirse en una máscara muy buscada y que proyecta una profunda significación en quien la usa. A pesar de lo que pueda suponerse no siempre genera el mismo tipo de personajes.
El interior de esta máscara es completamente negro y fue precísamente con esta máscara, con la que comencé a dar tanta o más importancia al interior de las máscaras que a su imagen o acabado exterior.


El interior de las máscaras muestra el aspecto que uno "viste" de la máscara, en oposición al que uno muestra al público – es el lugar que me invita o que me desafía a "entrar en la máscara" y es, como lo expresara una alumna del taller de construcción, la piel que está en contacto más íntimo con mi propia piel cuando me pongo la máscara. Un ¿defecto? de esta máscara es que su interior negro fue pintado con témperas y a pesar de las innumerables capas de fijador y laca que le he dado, nunca pude impedir que quien actúe con esta máscara por un cierto tiempo no termine con la cara manchada de témpera negra. Por eso, más que por su forma, la llamo "el duende", pues se empecina en dejar su impronta en quien la actúe.

15/10/06

Mask Makers Web

Soy miembro de la Mask Makers Web (red de mascareros) desde el 2005

en la página 11 de su galería se pueden encontrar estas mismas máscaras


En escena

Esta es la única foto que tengo de el coro en escena con sus máscaras.

Antigona









máscaras para Antígona, adaptación del clásico de Sófocles para la Compañía de la Escuela de Mimo-Teatro de Rodolfo Sardú, estrenada en Mayo de 2001













Las 14 máscaras del coro y los 2 cuervos fueron modeladas y diseñadas por mi y construidas (la cartapesta, el desmolde y el acabado) en colaboración con el elenco que las actuó. Luego de los tres meses que llevó terminar las máscaras coordine cuatro encuentros donde los actores se las pusieron por primera vez y comenzaron a descubrir sus movimientos.
El primero de los cuervos al que llamábamos "Cuervo Lil" es una máscara que está hecha siguiendo en general el estilo de Liliana Loizo, que es lo que también buscó Rodolfo. La máscara fue hecha en homenaje a ella, Miss Lil, mi primer compañera y gran maestra en construcción de máscaras.















El segundo al que llamábamos "cubista" fue personalmente rebautizado "Cuervo Rodo" en homenaje a Rodolfo Sardú luego de su partida; director de la obra y gran amigo.
















Tanto los cuervos, como las máscaras del coro poseen, por requerimiento técnico, ojos muy abiertos para poder trabajar en la penumbra de la escena y, en el caso del coro para que los actores puedan gesticular debajo de la máscara.
El coro trabaja en contacto directo con el público, a menos de un metro de distancia de la primer fila. En el caso de los cuervos las actrices que los encarnan despliegan una danza muy violenta y acrobática, acosándose mutuamente, en donde la visión, la circulación del aire y la comodidad de las máscaras es fundamental.
Las máscaras de los cuervos fueron construidas a la medida de sus rostros (y el de sus reemplazos). En el caso del coro cada pareja de actores que usaban una particular máscara la adaptó a sus rostros con cojines internos.